Jueza en Argentina otorga, tras divorcio, régimen de visita a los perros
En Argentina, una pareja tras culminar su relación, consiguió del Juzgado de Familia N° 6, ubicado en San Isidro, que les fuera otorgado un régimen de visita. El fundamento del inédito fallo no es otro más que Popeye y Kiara (así se llaman los perros) no son simples mascotas, no, son parte fundamental de la familia, son seres sintientes y así lo hizo constar en su decisión la jueza Diana V. Sica.
La administradora de justicia dejó claro en su sentencia que “si bien nuestro sistema legal aún no ha avanzado de manera tal que pueda prever y/o regular en qué situación quedarán, luego del quiebre de la unión, aquellos miembros que también integran la familia y se han incorporado a ella -para el caso dos perros; Popeye y Kiara, esto importa una realidad que no puede ser negada”.
Casos como este ocurrido en Argentina se presentan cada vez con más frecuencia en todas partes del mundo y cada vez más las mascotas dejan de ser consideradas “cosas irrelevantes” para ser consideradas como lo que realmente son: miembros de una familia y seres sintientes.
En España, por ejemplo, un proyecto de ley intenta resolver estos conflictos sobre la tenencia de mascotas tras los divorcios dándoles la figura jurídica de “seres vivos dotados de sensibilidad”.
Por este motivo los tribunales a la hora de juzgar deben tener en cuenta los criterios que beneficien en el cuidado, atención y bienestar del animal. La propuesta legislativa pertenece al Psoe y a Podemos, pero podría decirse que cuenta con el aval de toda la humanidad.
De esta forma ya en España los animales se dejaron de considerar bienes y con ello se suman a países como Francia, Alemania, Suiza, Austria y Portugal. Y quisiéramos decir que prontamente Venezuela dará pasos hacia ello.
En Chile también han dado pasos importantes a nivel constitucional para la protección animal, de hecho en uno de sus artículos (el 131) se lee : … “El Estado los protegerá, reconociendo su sintiencia y el derecho a vivir una vida libre de maltrato”. Además, se lee más adelante: “El Estado y sus órganos promoverán una educación basada en la empatía y en el respeto hacia los animales”.
Así pues ya las mascotas comienzan a dejar de ser vistas como lo que no son, objetos accesorios, para ser respetadas y valoradas como lo que realmente siempre han sido: seres sensibles y parte activa de las familias.
¿Está de acuerdo con la sentencia? ¿Cree que las mascotas son seres sintientes que deben y merecen una legislación especial que los ampare!? Déjenos saber su opinión…